Por: Aurelio Cáceres A. – Editor

“La opción por el Evangelio no puede posponerse” (S.S. Francisco)

El Santo Padre comentó el martes 7 de julio del año 2105, el motivo por el cual habla tanto de las personas necesitadas, de aquellos que se encuentran excluidos de la sociedad y suelen vivir en las periferias. Y dio el motivo con la claridad que lo caracteriza: “porque esta realidad está en el corazón del evangelio, y precisamente la actitud que tomemos ante esta realidad está en el protocolo por el que seremos juzgados en Mateo 25”. El Vicario de Cristo, una vez más, nos recuerda a través de sus palabras que es un hombre profundamente evangélico; como, claro, deberíamos serlo todos, porque uno de los regalos más grandes que nos ha dado el Padre es Su propia Palabra.

Es curioso, pero es justamente debido a su fidelidad al evangelio, que el Santo Padre en algunos círculos es mal interpretado y tomado como una especie de representante de las variopintas instituciones humanas. Esto se debe porque muchos se han acostumbrado a fundamentar sus modelos de vida en cualquier cosa inventada por algún grupito de mortales, más que en el propio Evangelio, que es el que contiene toda la historia de nuestras vidas por excelencia. El egocentrismo mordaz, complementado con el desconocimiento de la fe, ha llevado por un lado a proclamar al Papa como el “reformador de la Iglesia”, a otros a llamarlo el “Papa verde” porque, supuestamente, su encíclica “Laudato Si” es ¿pro-verde? Ni hablar de los movimientos pro-gays y sus multicolores personajes, que declaran aliviados de peso que los representa. La cosa se pone aún más álgida con la aparición —lamentable—, de frentes conformados por algunos miembros consagrados de la Iglesia, los que se suelen llamar “conservadores”, que ven en el Papa Francisco al peor modernista de la historia, a un cismático que va camino a dividir la Iglesia con sus ideas… ¿con sus ideas? Me pregunto ¿qué ideas son esas? Estos, a su vez, no se dejan estar e intentan hacerle la vida imposible de diversas maneras, entre otras, de criticarlo ácidamente por medio de las redes sociales, las que como todos sabemos sólo tienden al escarnio, tildándolo en algunos casos hasta de comunista.

Por ambos frentes, se inventan y difunden frases que él nunca dijo, se retocan fotografías que han llegado al extremo de mostrarlo ondeando una bandera del movimiento LGTB. Todos quieren vender algo y no han encontrado mejor producto para hacerlo que utilizar al mismísimo representante de Cristo en la tierra como su falsa fachada.

Me alegra sobre manera tener en claro que el Papa Francisco sabe a la perfección que al primero que tildaron de revolucionario, de incoherente, de insensato, de blasfemo —por llevar la palabra de Su padre a todos y demostrar con sus propias acciones que debemos amar a manos llenas—, es al mismo Jesucristo. Qué bueno que el Papa es un jesuita muy bien preparado, y como diría

San Ignacio de Loyola: “un soldado de Jesús”. El que sabe perfectamente que debe llevar la Misericordia a todos los rincones del planeta —no me refiero a la Misericordia insípida que le achacan algunos—, así como ser justo cuando la situación lo amerita y, por supuesto, trabajar por dos, porque cuando uno trabaja para el Señor no hay excusa que valga y no escatima en nada, incluyendo en ello la billetera.

El incesante pedido que nos hace el Papa Bergoglio para rezar por él no es un cliché, tampoco una manera de caerle bien a la gente. Bien decía San Pío de Pietrelcina, aquel gran conocedor de las astucias del demonio: “Es el diablo el que enfrenta hermano contra hermano”. Porque a satanás, si hay algo que no le gusta, es que se engrandezca a Dios. Por lo tanto, puedes llegar a imaginarte… ¿Cuánto odio le tendrá al Papa que intenta vivir el evangelio cada día de su vida?

A medida que vayas leyendo, conociendo y permitiendo que el Evangelio te haga suyo y, te des el permiso para crecer en la fe. A medida que vayas haciendo cada vez más y más tuyo a Jesucristo, encontrarás obstáculos que van a tratar de impedirte avanzar en Su camino; pero, también, recibirás Gracias que ni pensabas conocer a lo largo de toda tu existencia. Tú tranquilo, porque será precisamente esa fe que irás haciendo tuya la que te ayudará a sostenerte y permitirá que sigas adelante. Será Ella la que te alentará a no rendirte. Y no te preocupes por el escándalo, ni por el bullicio que empezarás a oír —pues al enemigo le encanta hacer mucho ruido—,  porque el ladrido de los perros te irá dando una señal inequívoca, será la señal que te dirá que vas avanzando a paso firme por el sendero correcto.

“Educad a vuestros hijos en el cumplimiento de los mandamientos enseñándoles a pedir a Dios la valentía necesaria para desafiar a la opinión dominante cuando está en contraste con el Evangelio. No tengáis miedo de nadar contracorriente”. (S.S. San Juan Pablo II)

CONTÁCTANOS

Puedes contactarnos el momento que gustes, estamos para compartir contigo la alegría del Resucitado.

Sending

©2025 ¡Ponle fe! Un apostolado comprometido con la Nueva Evangelización y el conocimiento de la fe.  -  Diseño web: DWMP

Translate »

Log in with your credentials

Forgot your details?